Tribuna libre
Jesús García Sánchez. Son las seis menos cuarto de la tarde. Primer Lunes de Cuaresma en Jerez. El sol que goza de una altura considerable no se ha querido perder la salida del "Gitano" más santo de todo Santiago y ha querido regalarle sus últimos rayos de la tarde.
¿Por qué empiezo así, preguntaréis?
Empiezo así, por no decir que son las seis menos cuarto de la tarde y, tras una basta chapa de obras, solo algunos privilegiados han podido disfrutar de ver al Señor del Prendimiento salir de nuevo de Santiago.
Aunque parezca irreal, este es el comienzo del Vía Crucis Oficial de la Unión de Hermandades de Jerez. Gran expectación provocó la decisión tomada por Bertemati, cuando se dijo que el Señor del Prendimiento tenía que salir de su iglesia, la Parroquia de Santiago El Real y del Refugio, templo que actualmente se encuentra cerrado al culto por su restauración.
Muchos cofrades se imaginaban esa estampa de plata y bronce saliendo del histórico templo, pero pocos pudieron ver y vivir ese momento, pues solo los medios de comunicación y un grupo escaso de hermanos que formaban parte del cortejo pudieron cotejar que, tras años de espera, la estampa se repetía.
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Cuando hablo de pocas personas, es que de un simple vistazo se podían contar los "privilegiados", y es que tras la basta chapa de obras, el público de Jerez se agolpaba en la "puerta de la obra" para ver a su Señor del Prendimiento, verlo en la calle. Solo los más osados y equilibristas repecharon por todo tipo de rejas y pilonas para robar con su vista la estampa que se privó a Jerez, y digo bien, se privó a Jerez de ver la salida del Señor del Prendimiento.
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Cuando hablo de pocas personas, es que de un simple vistazo se podían contar los "privilegiados", y es que tras la basta chapa de obras, el público de Jerez se agolpaba en la "puerta de la obra" para ver a su Señor del Prendimiento, verlo en la calle. Solo los más osados y equilibristas repecharon por todo tipo de rejas y pilonas para robar con su vista la estampa que se privó a Jerez, y digo bien, se privó a Jerez de ver la salida del Señor del Prendimiento.
Ahora se me vienen preguntas a la cabeza... ¿Para qué hacer esto? ¿Que necesidad había?
Ninguna. No había necesidad de hacer esto; el Señor sabe cual es su casa, los hermanos de la cofradía del Miércoles Santo saben cual es su casa, Bertemati sabe cual es la casa del Señor del Prendimiento, Jerez sabe cual es la casa del "Prendío"... ¿Entonces para que salir del templo si Jerez no puede disfrutar de la estampa? Pues lo siento, pero para mi es puro capricho del que así lo ha mandado.
Ninguna. No había necesidad de hacer esto; el Señor sabe cual es su casa, los hermanos de la cofradía del Miércoles Santo saben cual es su casa, Bertemati sabe cual es la casa del Señor del Prendimiento, Jerez sabe cual es la casa del "Prendío"... ¿Entonces para que salir del templo si Jerez no puede disfrutar de la estampa? Pues lo siento, pero para mi es puro capricho del que así lo ha mandado.
Resumiendo, con Bertemati contento, lo demás que mas da... Pero con errores como este, se sigue demostrando que la Iglesia en ocasiones no cuenta con su feligresía.
Solo unos privilegiados, los cuales la mayoría eran periodistas y algunos hermanos de la cofradía, pudieron ver al Señor del Prendimiento cruzando las puertas del gótico templo del arrabal homónimo.
