Redacción. Las hermandades de la "Madrugá" volvieron, un año más, a estar por encima de las circunstancias. El pánico en la zona de Plaza Esteve por el escape de gas en el Restaurante San Francisco, la suciedad que presentaban las calles por las que transitaron las hermandades, la falta de educación y civismo de un público que se refugia, en las primeras horas de "la noche de Jesús", en el alcohol y la diversión al lado de las cofradías hicieron otra Madrugada más, a pesar de las promesas de todos los años, que hasta que no comienza a amanecer no se respira buen ambiente por las calles del centro de nuestra ciudad. Cuando las tinieblas dejaron paso a la luz, el argumento cambió. El público correcto y educado se hizo dueño de la mañana del Viernes Santo. Fue entonces cuando Jerez comenzó a respirar de otra forma.
viernes, 18 de abril de 2014
El apunte de la Madrugada del Viernes Santo
viernes, abril 18, 2014