Continúan los trabajos de restauración del manto del Desconsuelo

Hermandad del Desconsuelo. La Comisión permanente de seguimiento de la restauración del manto del Desconsuelo, ha seguido trabajando durante todo el verano para continuar profundizando en la investigación y recuperación de la primitiva obra de Juan Manuel Rodríguez Ojeda.

Todas las investigaciones, prácticamente ofrecidas por medio de los datos históricos y la documentación de la Hermandad de la Amargura de Sevilla, nos llevan a los orígenes de la obra. Los técnicos, capitaneados por D. Antonio Mañes y su equipo, dejan claro y evidente el camino a seguir, pero con ciertas dificultades técnicas que debemos salvar para ir al correcto y primitivo dibujo de la obra.

Por ello, estos meditan y ofrecen la posibilidad de dar cabida a un nuevo técnico, que mediante su trabajo, nos lleve a facilitar la labor del bordador D. José Ramón Paleteiro, dando cabida en el staff de dirección a D. Rafael Rueda, técnico cordobés, que a través de sus labores profesionales como diseñador de publicidad y medios, nos puede ofrecer unas herramientas informáticas capaces de extraer exactamente todos los puntos de vista de la obra de Juan Manuel Rodríguez Ojeda.

A través de él, y de las fotografías tomadas tanto actualmente por D. Miguel Ángel Castaño como por la documentación que obra en la Hermandad de la Amargura, D. Rafael Rueda diseñará exactamente los trazos a llevar a cabo, para que el bordador siga las líneas, ángulos y espacios, tal y como fue concebido el manto y que a lo largo del tiempo a derivado en espacios no simétricos, dejando a las claras la preocupante situación del mismo.

Por tanto, le damos la bienvenida a D. Rafael Rueda, quien con mucho interés ha tomado ya parte de su trabajo, quedando impresionado por el volumen y grandiosidad del mismo, trabajando codo con codo con el bordador.

Además, a través de su trabajo, éste quedará bien recogido y guardado para toda la vida, ya que informativamente, quedarán plasmadas todas las dimensiones y efectos propios de la restauración, como si de un seguro se tratase, con el que siempre podremos tener los datos técnicos exactos, por si surgiera alguna desgracia sobre la obra. Por ello, siempre tendremos en nuestro poder la recuperación histórica de la misma, pudiendo servir de patrón en cualquier caso.

Las tareas avanzan poco a poco, sabiendo que la empresa es difícil y que la capacidad de los técnicos que reune esta Comisión es de sobra acreditada para llevarla a cabo.

Desde éstas líneas agradecemos y animamos a seguir en el empeño de recuperar esta obra entre todos, así como agradecer siempre a la Hermandad de la Amargura de Sevilla sus estancias en su casa de hermandad, centro operativo de las reuniones mensuales.

En breve ofreceremos nuevos datos del trabajo corporativo y en especial de los descubrimientos tanto de D. Rafael Rueda como del bordador D. José Ramón Paleteiro, quien está gratamente sorprendido de la historia que atesora esta obra cada vez que comienza en su taller cualquiera de las funciones a desempeñar.