Corpus de Jerez: una festividad que agoniza

Beltrán Castell. Nuestra ciudad vivió en la tarde de ayer la festividad del Corpus Christi con la procesión del Santísimo que anualmente organiza el Cabildo Catedral. Una festividad que pasa de puntillas por Jerez con una procesión que, año tras año, baja muchísimos enteros en varios aspectos.
En cuanto a público se refiere, salvando el tramo de calle Larga, muchas calles del itinerario muestran una imagen prácticamente desértica.

En cuanto a la organización de la procesión, no es de recibo que se salte a la torera la antigüedad de las hermandades y asociaciones religiosas, ubicando a muchas de ellas en lugares que no le corresponden, además de los continuos cortes que se forman en el cortejo de una procesión con un único paso.

Si hablamos del exorno de las calles, salvo cuatro altares, las alfombras de sal y alguna colgadura o repostero disperso, el recorrido del Corpus muestra un aspecto completamente desangelado, con escaparates sin decorar y calles sin engalanar.

Y por último, la ausencia total y absoluta, salvo el montaje de alfombras y de los altares, de una jornada de vísperas.

Partiendo de la base de que en Jerez la festividad del Corpus nunca se ha vivido con la fuerza y el arraigo de ciudades como Sevilla, Granada o Toledo, muchas son las soluciones que existen para que esta fiesta recobre la importancia que se merece.

Primero: que el Cabildo Catedral delegue la organización del Corpus a las hermandades, siendo éstas, a través de la coordinación del Consejo, las encargadas de llevar a cabo la procesión del Santísimo.

Segundo: recuperar el Jueves de Corpus en el calendario festivo de Jerez.

Tercero: retomar la participación de distintas imágenes en la procesión del Corpus, creando un cortejo procesional más atractivo de cara al espectador, con traslados de ida en la víspera y de regreso, acompañados musicalmente, una vez finalizada la procesión.

Cuarto: organizar una jornada de vísperas, en este caso el miércoles, como Dios manda, aprovechando el tirón del público en el centro al ser jornada laborable, con la apertura de todos los templos desde primera hora de la tarde con la exposición del Santísimo, conciertos de marchas procesionales en varias plazas del centro, concursos de altares, escaparates, balcones y alfombras financiados por el propio ayuntamiento, traslados de las imágenes a la Santa Iglesia Catedral...

Quinto: Tomar por un recorrido que evite la zona de José Luís Díez, Santa Isabel o Visitación, y buscar las calles más próximas a Larga o Plaza del Arenal, donde normalmente se concentra la mayoría del público. Un ejemplo de itinerario sería el siguiente: Santa Iglesia Catedral, Plaza de la Encarnación, De la Rosa, Manuel María González, Pozuelo, Latorre, Consistorio, Plaza de la Yerba, Conde Cañete del Pinar, Plaza Plateros, Plaza Santo Ángel, Tornería, Eguílaz, Plaza del Banco, Larga, Lancería, Plaza Monti, Manuel María González, De la Rosa, Plaza de la Encarnación, Santa Iglesia Catedral.

Sexto: Iniciar la procesión a nueve de la mañana, con una duración de dos horas, con el extra de disfrutar de los traslados de regreso de las imágenes al mediodía.

En definitiva, una serie de propuestas que, a buen seguro, lograrían otorgarle a la festividad del Corpus la importancia que se merece y que en la actualidad, por desgracia, ha perdido por completo.

Foto: Fernando Morales.