Diario de Jerez. Cáritas Diocesana recibe una solicitud de ayuda al día por parte de familias que desean que este organismo de la Iglesia les ayude a pagar la hipoteca de sus viviendas. Según explicó a este medio Marian Pozo, responsable de Acción Social de Cáritas Diocesana, "los datos sobre personas a las que ayudamos han permanecido estables a lo largo de los últimos seis meses".
Cabe destacar que esa solicitud diaria de ayuda que se recibe en Cáritas es a nivel diocesano. Como es sabido, la Diócesis de Jerez abarca a numerosas poblaciones serranas y algunas costeras. "Ciertamente -añadió Pozo- recibimos como mínimo una solicitud de ayuda para hipoteca al día por parte de las parroquias. Es un flujo continuo que no cesa". Según dice, "las familias piden ayudas para cualquier cosa que les ayude a sobrevivir. En muchas ocasiones la hipoteca es el gran problema. Si les das alimento, les ayudas al pago de la luz o el agua les resulta ya de por sí estupendo".
Cabe destacar que prácticamente ninguna parroquia ayuda en el pago de las hipotecas. Lo que suele hacer Cáritas es ponerse en contacto con los bancos y ayudar, como en el caso de los desahucios, a nivel jurídico buscando compromisos con las entidades crediticias.
"Ante los bancos -apunta Marian Pozo- ejercemos casi de abogados. A veces nos hemos tenido que poner en contacto con abogados para que ayuden a algunas familias que se sienten sobrepasadas por los procedimientos burocráticos. En otra palabras: no entienden a qué se refieren esos documentos que reciben en los que se les está advirtiendo que van a tener que desalojar sus viviendas". Según esta trabajadora de Cáritas Diocesana, en esta organización católica han llegado a atender casos en los que una familia les ha pedido ayuda para pagar una vivienda de la que les echaron hace tiempo. "En muchas ocasiones, el problema no es la deuda sino la familia que se queda en la calle".
Para Marian Pozo, estos grandes problemas a los que se enfrentan muchas familias jerezanas llegan en el momento en que se acaban el desempleo y las posteriores prestaciones. "Es en dicho momento cuando piden ayuda". Los tipos de ayuda que se solicitan en Cáritas son de lo más diverso. "Nos llegan personas que quieren que les paguemos cuotas de las hipotecas, familias amenazadas por desahucios, otras que se les ayude a pagar la luz y el agua...".
Uno de los principales problemas a los que se enfrentan en Cáritas es que cuando los cabezas de familia se deciden a solicitar ayuda "hace ya tiempo que las prestaciones se han acabado y, por entonces, las deudas con las que llegan están muy atrasadas y son importantes. Cuando vienen a Cáritas -añade la responsable de Acción Social en Jerez- el volumen de la deuda es grande pues han esperado al último momento para venir".
Como es fácil imaginar, Cáritas tiene liquidez en alimentos, ya que gestiona sus propios almacenes, no así de dinero. "Ayudarles en la alimentación viene a suponer también que el poco dinero que tienen lo destinen a otros fines necesarios. De esta forma se les desahoga".
Según el funcionamiento de Cáritas, es la propia parroquia la que se hace cargo de sus vecinos con problemas, si bien cuando el problema sobrepasa las posibilidades de la parroquia es cuando el caso llega a la central de Cáritas Diocesana.
Como es sabido, las familias atendidas por las parroquias jerezanas son numerosas, especialmente en la Zona Sur de Jerez. No en vano, en la parroquia de San Rafael se atiende a unas 350 familias, mientras en la de Santiago se hace lo propio con unas 200.
En la actualidad, Cáritas Diocesana se encuentra en plena fase de elaboración del denominado 'Observatorio de la Realidad' en el cual se recopilan todos los datos sociales y económicos relacionados con la pobreza en la ciudad. Será después del verano, concretamente en septiembre, cuando se presenten los resultados correspondientes a 2010.
lunes, 18 de julio de 2011
Cáritas recibe al día una petición de ayuda para pagar la hipoteca
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