13 años después

Beltrán Castell. La Hermandad del Perdón comienza a ver la luz al final del túnel. Y entiéndaseme el término túnel cuando me refiero a los contratiempos y reveses que esta cofradía ha tenido que sufrir durante los últimos años.

13 años han tenido que pasar desde aquel Vía Crucis de las Hermandades, que sirvió para trasladar a las imágenes titulares de la hermandad desde la Parroquia de Santa Ana hasta la Ermita de Guía, para que se realicen unos trabajos de adecentamiento prometidos desde entonces.

Y es que, como pueden apreciar, las obras del entorno de la Ermita de Guía se encuentran bastante avanzadas en lo que se refiere a la construcción del parque que rodea al templo.

Ahora sólo queda esperar lo más importante: que las obras realizadas impidan que se vuelvan a producir allí las tan temidas inundaciones y que la Hermandad del Perdón pueda regresar a su casa.

Visto lo visto, parece que ya queda poco.